Jóvenes. “Savia nueva” para la transición energética
La Formación Profesional. Más allá de la educación
La tasa de paro juvenil en España es la segunda más elevada de la UE, con un porcentaje que ronda el 35%, sólo por detrás de Grecia (43%), según los datos de Eurostat.
¿Por qué se produce esa situación en España? Pues, aunque son muchos los factores, otro aspecto que está íntimamente relacionado con el paro juvenil es la tasa de abandono escolar temprano (el porcentaje de población entre 18 y 24 años que no completa la educación secundaria superior o de segunda etapa y que tampoco realiza otro tipo de formación), en la que España ocupa la tercera posición en Europa por detrás de Malta y Portugal.
La Formación Profesional, va más allá de la cuestión puramente educativa, las políticas de FP no son sólo políticas educativas, sino también son políticas sociales del contexto económico precisamente porque si se compara, por ejemplo, la tasa de desempleo entre los jóvenes formados en FP y los que no varía considerablemente. Según un estudio, los graduados del FP tienen una tasa de desempleo cuatro veces inferior al desempleo promedio de los jóvenes de entre 16 y 24 años. Frente a la tasa media del 35%, los graduados de secundaria desempleados en los nueve meses posteriores a la finalización de los cursos son del 8,88% y los graduados medios representan el 8,13%.
“En un país como el nuestro no debería permitirnos tener una tasa de desempleo juvenil del 35%, cuando tenemos empresarios diciendo que no pueden cubrir puestos de trabajo”
El Binomio Energía & IT en la Transición ENERGETICA.
El sector energético por su transcendencia es un vector económico absolutamente prioritario y como tal, el empleo de calidad está asociado a las nuevas especializaciones productivas de la transición energética y al cambio de modelo de crecimiento. Ahí es donde han de dirigirse las políticas activas de empleo y de Formación Profesional.
España tiene una gran oportunidad para generar empleo, alto valor añadido ante el desafío que supone la transición energética a una economía descarbonizada basada en eficiencia energética y generación de energías renovables, en un modelo de distribución y suministro de electricidad descentralizado. Un escenario de gestión energética donde las capacidades y habilidades digitales son un componente crítico.
Todo el sector eléctrico, desde fabricantes y distribuidores de material hasta instaladores y, cómo no, un buen número de consultores lleva mucho tiempo hablando de los nuevos modelos de negocio energético que se centran en la combinación de autoconsumo + baterías de almacenamiento + recarga VE + gestión inteligente de la demanda. Todo ello configura los principales ejes de desarrollo del gran reto que tiene que acometer el sector en la próxima década en el cumplimiento de los objetivos que plantea el “PNIEC” (Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030)
Este cambio de modelo energético abre la oportunidad de que nos beneficiaremos de un aumento adicional de empleos, que se calculan entre 250.000 y 350.000 en 2030, así como de 236.000 millones de euros en inversiones entre 2021 y 2030 y del PIB, con entre 19.300 y 25.100 millones de euros al año. Además, podríamos reducir la importación de combustibles fósiles en 75.000 millones de euros hasta 2030. Con las medidas contempladas, en 2030 reduciríamos en quince puntos porcentuales esta dependencia energética, pasando del 74% de la actualidad al 59%.
Para cumplir todo ello y ante una preocupante perspectiva de capacidad productiva para cubrir el relevo generacional de un sector como el de las instalaciones eléctricas que tiene su media de edad en torno a los 55 años. Es obvio que necesitamos, por un lado, una urgente reforma del modelo educativo que despierte vocaciones técnicas entre los alumnos de ESO y Bachillerato, y un mayor reconocimiento social a la Formación Profesional que permita cubrir una parte importante de los nuevos puestos de trabajo que se generen con nuestros jóvenes y, por otro lado, fomentar el necesario y continuo reciclaje profesional de los trabajadores en activo.
Empresarios del sector y centros formativos deben aunar esfuerzos y empujar en la misma dirección para lanzar el mensaje a la Administración, la opinión pública, AMPA’s (Asociación de Madres y Padres de Alumnos) y, sobre todo, a los propios estudiantes. Su futuro, y el de todos, está en sus manos.
Especialmente en talento de los jóvenes es una nueva “energía” muy necesaria para impulsar el sector ante el reto que supone la transición energética.
Sin duda nuestros jóvenes serán los principales protagonistas del relevo generacional previsto en el sector energético para los próximos años como actores de grandes cambios tecnológicos y sociales por ello uno de los temas principales a tratar en 2020 será la nueva etapa que la formación profesional debe emprender en nuestro país donde socialmente no se le ha hecho ni justicia ni reconocimiento.
Resulta fundamental contemplar dentro del PNIEC el papel que debe desempeñar la formación profesional y en qué medida contribuirá a los más de 300.000 puestos de trabajos estimados para alcanzar los objetivos a 2030.
Convendría centrar la mirada en el largo recorrido que puede tener la FP Dual en nuestro país y que convendría acelerar al máximo ya que actualmente representa menos del 5% de la Formación Profesional, mientras que en Alemania y Francia, como países de referencia, este porcentaje alcanza el 60% y el 50% respectivamente. Conociendo la experiencia de estos dos países, cabe resaltar que se necesita una importante labor de promoción de los grandes beneficios que proporciona la FP Dual para las empresas los jóvenes y la sociedad.
Nueva oportunidad en la FP. Aprendiendo de los mejores.
La FP Dual, a pesar de lo mucho que tiene que avanzar en España, el sistema empieza a dar sus frutos, con la participación de 10.000 empresas que ofrecen prácticas, renumeradas o no dependiendo de la Comunidad Autónoma.
Estamos todavía lejos de un país como Alemania, pionera en este tipo de formación. El país germano identifica más de 300 titulaciones y capacita a más de medio millón de aprendices cada año que pueden acceder a un puesto de trabajo o a un grado universitario. El 70% de los jóvenes que realiza la FP Dual en Alemania consigue trabajo.
En 2019 el Gobierno de España ha comunicado en varias ocasiones su apuesta por la formación profesional a la que quiere añadir 80 títulos más a los 172 existentes.
Ciberseguridad, instalación y mantenimiento de redes 5G o robótica serán algunas de las nuevas titulaciones que podrán estudiar los jóvenes en centros especializados. De esta manera se abre el abanico a una nueva salida laboral que ya es clara alternativa a los estudios universitarios.
Hace un par de años, el estudio ´Reflexiones sobre la formación profesional de grado medio y superior en España´ realizado por las fundaciones Atresmedia y Mapfre en colaboración con el IESE, vaticinaba que en 2020 el 50% de los puestos de trabajo europeos iría destinado a titulados en FP. Ya entonces la Comisión Europea subrayaba que los 13 millones de estudiantes europeos de FP anuales no eran suficientes para cubrir la demanda de las empresas en un futuro muy próximo.
El futuro ya está aquí y, recientemente, un análisis de Adecco recoge que dentro de lo que se entiende como FP, los perfiles más demandados se corresponden con los ciclos formativos de grado superior. Estas vacantes han llegado a suponer casi un 25% de todos los puestos demandados del mercado laboral español. Con casi un 18% se sitúa la demanda de titulados en ciclos formativos de grado medio. Juntos conforman ese 43% que ha conseguido batir a la preparación universitaria. Con estos datos calificaba de más que evidente el repunte de la FP.
Entre los sectores más proclives a buscar entre estos titulados, identifica: Administración y Gestión, Electricidad y Electrónica, Fabricación Mecánica, Informática y Comunicaciones, e Instalación y Mantenimiento. Estas especialidades se reparten el 36% de las ofertas que buscan a candidatos con FP. Por el momento las comunidades que lanzan al mercado mayor número de ofertas para titulados en FP son Catalunya, Madrid, País Vasco y Comunidad Valenciana. Estos territorios se disputan 7 de cada 10 plazas ofertadas.
El sector industrial es uno de principales ofertantes, y según un estudio elaborado por la Fundación Bankia por la Formación Dual y Fundación Sepi la formación profesional de los empleados aumenta el nivel de productividad de la empresa industrial en un 11,5%.
Apuesta por la FP
Para desarrollar más la FP dual, es fundamental que los empresarios apuesten por ella como algo estratégico. La ventaja para las empresas es que puedan integrar rápidamente en su estructura a los jóvenes a quienes han dado formación y a quienes han preparado con su propia tecnología. El retorno de la inversión realizada es inmediato, la eficiencia es enorme y la seguridad muy grande puesto que la empresa conoce bien a quien contrata.
Para muchas pymes por sus limitaciones estructurales y por lo novedosa que es la modalidad resulta compleja de aplicar. Para ello, es importante que las grandes empresas ayuden a las pequeñas y medianas, en su cadena de valor en su implementación. Igualmente es fundamental que entre las pymes se establezca cooperación estratégica para compartir la FP dual. Teniendo en cuenta el peso de las pymes en el conjunto de la economía estas medidas impulsarán la competitividad del país.
La FP Dual actual todavía ofrece límites difíciles de salvar para muchos empresarios españoles. El modelo es ideal para que los jóvenes se incorporen al mercado laboral en empresas con marcada producción industrial y de media y gran dimensión, como puede ser la industria del automóvil o la alimentaria, sin embargo, es difícil que se ajuste a la realidad de una mayoría de pymes que forman la mayor parte del tejido empresarial de nuestro país, y muy en particular a las pymes de instalaciones eléctricas, más del 95% de nuestro sector. Es preciso establecer una regulación más favorable y adaptada a nuestra realidad operativa y estructural.
Este sistema de aprendizaje supone una gran oportunidad que no se puede perder, para que las empresas puedan disponer de una cantera propia de personal cualificado. Es tiempo de actuar y hacer una firme apuesta por que las empresas contribuyan a formar a las personas jóvenes, mediante la cooperación con los centros de formación.
ASELEC apuesta por los jóvenes.
A pesar de los contratiempos y barreras actuales. Desde las asociaciones de instaladores como organismos vertebradores se deben activar medidas que impulsen y faciliten la implantación de la FP Dual en el sector y colaborar en este bien común muy estrechamente con los Institutos de Enseñanza Secundaria (IES). En ASELEC (Asociación de empresarios de instalaciones eléctricas, telecomunicaciones y energías renovables de València) creemos que hay que promover el espíritu asociativo entre nuestras empresas para promover la FP dual por las dificultades que supone en la actualidad implementarla individualmente y a la vez fomentar la vocación por nuestra profesión.
Todo esfuerzo será poco si queremos disponer de un tejido productivo cualificado ante los nuevos retos profesionales y empresariales que tenemos por delante. Por en ASELEC llevamos años cooperando con la mayoría de los centros formativos de la provincia de Valencia. Pero nunca, como ahora, ha habido tanto interés por la captación de alumnos de ciclo medio de electricidad y electrónica. Junto con los centros formativos tenemos que fomentar la vocación desde primaria que garantice el relevo generacional en una actividad con grandes expectativas de demanda y desarrollo de empleo cualificado.
Recientemente, en octubre pasado, tuvimos nuestra reunión anual con representantes de más de 15 centros de enseñanza secundaria de la provincia de València que imparte ciclos medio y superior de electricidad, electrónica, energías renovables, telecomunicaciones, mecatrónica y robótica respectivamente.
El sector eléctrico necesita rejuvenecerse con futuros técnicos que, además, tengan vocación emprendedora.
Desde ASELEC además de alertar de la necesidad imperiosa de despertar vocaciones técnicas entre nuestros jóvenes, no podemos olvidar que somos una asociación empresarial y queremos fomentar empresa. Necesitamos que muchos de ellos eleven esta vocación hacia la iniciativa emprendedora, siendo el relevo natural de muchas pequeñas empresas, sobre todo instaladoras, que se encuentran muy próximas al umbral de la jubilación. Para que este relevo se produzca de forma evolutiva y sin romper equilibrios se debería empezar a trabajar decididamente ya, ahora y desde las bases, creando iniciativas desde la escuela y las empresas, empezando por la ESO hasta la Universidad y, muy especialmente, en los ciclos de FP de grado medio y superior. A través de la cooperación con los IES invitamos a sus alumnos a participar en actividades que les pueden orientar a llevar a cabo un proyecto empresarial que puede ser nuevo o dando continuidad a una empresa en actividad cuyo propietario está próximo a la jubilación.
“En definitiva emprender y reemprender”.
En pocos sectores se pueden encontrar tantos aspectos interesantes y tecnologías disruptivas como en el binomio Energía & IT, que debemos mostrar a nuestros adolescentes, para que las conozcan y despierten su inquietud por las mismas.
Juanjo Catalán
Consultor empresarial y Coolhunter energético. Asesor de ASELEC