Septiembre es conocido como el mes de los buenos propósitos. Es cuando, después de las vacaciones, nos comprometemos a hacer todo tipo de cambios: aprender inglés, ir al gimnasio, empezar una dieta o poner en orden la casa.

Con la vuelta al cole y al trabajo, también es un excelente momento para organizar nuestro hogar y, además de limpiar armarios y deshacernos de lo que ya no necesitamos, también deberíamos aprovechar para revisar la instalación eléctrica y de telecomunicaciones de nuestra vivienda para asegurarnos de que esté en buenas condiciones y prevenir cualquier mínimo riesgo.

Porque, al igual que cuidamos nuestra salud, comprobar que el sistema eléctrico de nuestro hogar esté en buen estado es fundamental, ya que cualquier mínimo fallo o anomalía podría ser verdaderamente peligroso.

¿Por qué es importante revisar la instalación eléctrica?

La seguridad de tu hogar empieza por la instalación eléctrica, porque, una instalación eléctrica en mal estado puede suponer un importante riesgo, aumentando las probabilidades de cortocircuitos, sobrecalentamientos o malas conexiones que podrían provocar incendios o fallos graves en el suministro.

Realizar una revisión anual de la instalación eléctrica permite detectar a tiempo cualquier tipo de fallo que pudiera poner en peligro tanto a las personas que habitan la vivienda, como a la salud de los electrodomésticos y dispositivos electrónicos, y comprobar si realmente la red eléctrica está en condiciones de soportar el uso diario de forma eficiente y segura.

Además, es una oportunidad para actualizar el sistema y adaptarlo a nuevas necesidades que nos hayan podido surgir, como la instalación de tomas de corriente adicionales o la mejora de la eficiencia energética, lo que te permitiría reducir el consumo eléctrico y, por tanto, las facturas.

¿Cuándo hay que realizar la revisión de la instalación eléctrica?

Aunque los Organismos de Control Autorizados (OCA) recomiendan revisar el suministro eléctrico al menos cada diez años, por nuestra experiencia, lo idóneo es realizar una revisión anual de la instalación eléctrica, para así comprobar que funciona correctamente.

Además, el REBT (Real Decreto 842/2002, de 2 de agosto), por el que se aprueba el Reglamento electrotécnico para baja tensión) apunta:

• Según la ITC BT 15: Verificaciones e inspecciones:
  • Las viviendas de más de 50kW de potencia instalada necesitan de inspección periódica por OCA cada 5 años.
  • Las zonas comunes de los edificios de viviendas con potencia superior a 100kW se inspeccionarán por OCA cada 10 años.
• Según la ITC BT 18: Instalaciones de puesta a tierra:
  • En todo tipo de instalaciones se deberá comprobar la instalación de puesta a tierra, al menos anualmente, en la época en la que el terreno esté más seco. Para ello, se medirá la resistencia de tierra, y se repararán con carácter urgente los defectos que se encuentren.

Aun así, existen signos que indican que es necesario realizar una inspección de la instalación eléctrica de forma urgente, como por ejemplo, que se produzcan apagones con frecuencia, que las luces parpadeen constantemente o que los enchufes o electrodomésticos fallen sin razón aparente, ya que todo esto podrían ser señales de que existen algún problema en el sistema eléctrico.

Por otro lado, la antigüedad de la vivienda es otro factor muy a tener en cuenta. Si tu casa tiene más de 10 años y nunca has revisado la instalación eléctrica, deberías hacerlo cuanto antes, ya que, con el tiempo, los materiales pueden estropearse o no ofrecer el rendimiento necesario para satisfacer la demanda actual. Así mismo, las instalaciones eléctricas que no cumplen con las normativas actuales también representan un importante riesgo.

En este sentido, una revisión regular no solo garantiza la seguridad, sino que también permite que el sistema esté actualizado y cumpla con las leyes vigentes, lo cual es especialmente importante si en algún momento decides vender o alquilar la vivienda.

Estos son los problemas más comunes en una instalación eléctrica

Dados los riesgos que puede implicar tener una instalación eléctrica en mal estado y la importancia de cumplir con las pertinentes revisiones, a continuación, indicamos los problemas más frecuentes que pueden aparecer en una instalación eléctrica, los cuales obligarían a la intervención de un profesional rápidamente:

• Fallos en los interruptores.
• Fusibles forzados o manipulados.
• Humedad cerca de los puntos eléctricos.
• Aparatos eléctricos en mal estado.
• Insuficiencia de circuitos eléctricos.
• Falta de tomas de tierra.
• Secciones de cable que no cumplen los requisitos.
• Proximidad de enchufes a zonas de agua.

La importancia de contar con un profesional eléctrico autorizado

Revisar o reparar una instalación eléctrica no es algo que deba hacerse de manera improvisada ni por aficionados.

Dado que cualquier error que se cometa puede tener graves consecuencias, es imprescindible que la revisión y manipulación del sistema eléctrico la realice un técnico autorizado, que disponga de la formación, los conocimientos técnicos y la experiencia necesaria para identificar un posible problema y aplicar las soluciones adecuadas de manera segura.

Un profesional autorizado también estará al tanto de las normativas vigentes, y podrá garantizar que tu instalación cumpla con todas las leyes y requisitos técnicos. Esto es especialmente importante si en algún momento piensas vender tu casa, ya que una instalación eléctrica en mal estado o que no cumpla la normativa puede representar un obstáculo en el proceso de venta o alquiler.

Además, un técnico calificado podrá ofrecerte recomendaciones personalizadas sobre cómo optimizar tu instalación para que sea más eficiente, segura y eficaz frente a las demandas actuales de energía.

Puedes encontrar un listado completo de empresas asociadas ASELEC aquí. 

Como ves, hacer una revisión de la instalación eléctrica en septiembre te permitirá afrontar la vuelta a la rutina con mayor tranquilidad, previniendo riesgos y asegurándote de adaptar tu vivienda a tus necesidades.